De España o América Latina, y viceversa, del ámbito jurídico, financiero y empresarial.
Conforme a los requerimientos del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación.
Con supervisión del estilo, la semántica, la gramática, la ortografía y la terminología en castellano.
Licenciada en Traducción e Interpretación por la Universidad de Vigo, 1998
Traductora jurada de inglés nº 510, nombrada por el Ministerio de Asuntos Exteriores español, 1999
Experto Universitario en Mercados y Riesgos Financieros, 2015
Máster en Derecho del Comercio Internacional de la UNIR, 2020 (en curso)
En 2016, fui una de las 33 personas (entre 3.600) que completó el proceso de selección para traductores de español realizado por Naciones Unidas.
También he resultado adjudicataria de varias licitaciones para colaborar como traductora externa con organizaciones internacionales como el Centro de Traducción de los Órganos de la Unión Europea (FL/FIN17/ de traducción financiera) en 2018 y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) (RFQ_273 para proveedores de traducción externos) en 2019.
Doy al cliente lo que necesita, tal como lo pide y cuando lo necesita.
Mediante contrato, con clientes y colaboradores.
Aprovecho al máximo mi especialización, las colaboraciones y la tecnología.
Presupuestos claros y cumplida información sobre mi forma de trabajo.
Acepto exclusivamente encargos adecuados a mi cualificación.
Me integro de forma fluida en un equipo para lograr sus objetivos.
En 2020 se cumplen 20 años desde que comencé a trabajar como traductora autónoma a tiempo completo.
Para celebrarlo, he recogido en un par de artículos algunas reflexiones fruto de lo aprendido que podrían resultar de interés para quienes visiten esta página.
Gracias a todos aquellos que han confiado en mí a lo largo de este viaje que espero se prolongue durante otros satisfactorios 20 años más.
Jamás habría imaginado que cumpliría 20 años en esta profesión en un momento tan convulso, con una crisis que provocará cambios irreversibles en nuestra sociedad. Me ha sorprendido lo mucho que algunos clientes han empatizado conmigo ahora que están teletrabajando y me han consultado sobre esta modalidad tan conocida por los profesionales de la traducción autónomos. De repente, han tomado conciencia de todo lo que implica (ventajas y desventajas) y eso les ha hecho valorar más nuestro trabajo.
La crisis también ha venido a mermar el volumen de negocio de muchos compañeros de profesión, como en tantos otros sectores. Tengo la suerte de poder decir que no ha sido mi caso, ni el de muchos otros compañeros. Empresas y organizaciones se han afanado en crear y publicar contenido para orientar, aconsejar y tratar de tranquilizar a clientes, inversores y empleados, y ahí hemos estado los traductores para dar difusión a dicho material en las lenguas necesarias. Pese a la incertidumbre generada por la Covid-19, estoy segura de que los profesionales de la traducción y la interpretación seguiremos prestando un servicio esencial al tejido industrial y productivo internacional, y así contribuiremos a la recuperación por el bien de toda la población.
Por favor envíeme los documentos a traducir y/o el material de referencia a:
belencarneiro@belencarneiro.com